Encontre este maestro en la red, se llama Dioscórides, me pareció interesante compartir con ustedes. Desde 1978 es profesor de la Escuela de Artes Plásticas de la Universidad Nacional de Colombia donde dicta clase de grabado, dibujo, taller de Espacio, Cuerpo, Performance, Taichi y Chigong. Viaja al desierto y la selva con sus estudiantes para realizar trabajos de performance y land art.
Acaba de regresar de la selva del Guaviare donde ese encontraba visitando pinturas rupestres, cuevas, y en contacto con los nómadas de la selva amazónica: los Nukak.
En sus clases de dibujo y taller enseña también técnicas de masaje de digitopuntura y meditación para preparar el cuerpo como instrumento de trabajo y para despertar la intuición. Realiza talleres de tarot, I Ching y cauris africanos, como mapas mentales para estimular la imaginación y revelar la sincronicidad. El I Ching es el libro de los cambios; el Tarot es una máquina de imaginar; los cauris son la voz de los espíritus.
Su herramienta de trabajo en la enseñanza es: Sembrar bambú en el corazón.
Se trata de un método de origen chino para señalar como instalar el conocimiento en el cuerpo, que toma tres de sus partes como metáforas. El ojo para aprender a VER: la observación meditativa de la naturaleza hace que se produzca la empatia y las cosas nos entregan sus secretos. El corazón para RESONAR: las emociones se guardan en el corazón y este se convierte en una especie de gong que cuando es golpeado resuena emitiendo su mejor sonido. La mano para el HACER: ella es como la aguja de un sismógrafo, y cuando nuestro interior tiembla, la mano traza la huella del aliento. Todo es energía. Sin aliento las formas representadas son como huesos muertos.